Disfruta tu hoy, tu presente.
En cada paso de nuestra vida tomamos decisiones que nos alejan de esos sueños que tanto anhelamos, ya sea sentir tranquilidad, cambiar de profesión, de trabajo, o ir a esos lugares que siempre has querido.
Hay cientos de autores y filósofos que nos explican la importancia de hallar ese propósito de vida, de buscar la felicidad como clave, de ser positivos, etc. Cada vez se crean más corrientes como la psicología positiva para mejorar el crecimiento personal y buscar el bienestar emocional, pero ¿qué tanta practica pones a lo que en teoría ya conoces?
Nos fallamos al tomar decisiones que entristecen a las personas que queremos, pero también nos fallamos cuando hacemos cosas que no amamos solo por ver a los demás felices. Pasa mucho que exteriorizamos la felicidad de tal modo que cuando miramos hacia adentro reconocemos muy poco a la verdadera felicidad que vemos y sentimos dentro de nosotros.
Muchas personas en edades cercanas a los sesenta mencionan que van a viajar ahora sí, a disfrutar de trabajo, los ahorros y lo que se esforzaron construyendo su patrimonio, pero luego aparecen los nietos, ayudar a los hijos terminar con algunas deudas, planean re diseñar la cocina, y deciden seguir centrándose en la familia, atándose a lo externo, y cuando se encuentran a solas se sienten que hicieron mucho pero no les genero tanta felicidad, y las lágrimas, las emociones, el sentido de vida y comienza a disminuir esa auto-independencia, se bajan las defensas y llegan las enfermedades, y comienzan con esa dualidad entre lo que quisieron y quienes son.
Muchas personas esperan a construir para gozar, y se olvidan de lo efímera de vida. Recuerda que el momento es aquí y ahora, Tu presente.
Se con mi ejemplo anterior puedo generalizar, pero estará sujeto a la cultura, las tradiciones del país, lo que quiero dejarte claro es que no es posible lograr el objetivo espiritual, encontrar la esencia, propósito de vida de manera grupal, estos son temas individuales y cada quien toma su tiempo, su proceso.
Hay una película animada que me gusta mucho por su enseñanza y es Kund Fu panda, hay una parte en que el maestro (la tortuga) le dice a Panda, “recuerda que el pasado es historia, el futuro no existe y el presente es regalo”.
Cuanto de nosotros nos perdemos en el planificar los viajes de los siguientes años, el diseño de cuando pueda comprar la casa, el carro perfecto y cuando por fin lo logras te das cuenta que has dejado de disfrutar cosas maravillosas, porque postergaste lo que te generaba bienestar, como un viaje corto a ver la familia, ir a tu restaurante favorito porque había que ahorrar y muchísimas cosas más, y eran eso, cosas nada más y ¿tu felicidad?, ¿en que la basas?
Nos fallamos muy seguido, tan seguido como para ser poco exigentes o muy exigentes con nosotros mismos, y entre una y la otra seguimos perdidos en encontrar ese sentido de vida, esa motivación visceral para cambiar el rumbo de nuestra existencia.
Perdernos es una de las mejores maneras de encontrarnos con ese YO, esa esencial, encontrar nuestro espíritu de gran llama dispuesto a conquistar los sueños.
¿Cómo identificar que te fallas?
1. Lo que haces, aunque lo hagas muy bien, no te satisface.
2. Le das gusto a los demás antes que a ti.
3. No te das premiaciones por tus logros.
4. Te sientes solo aun estando en compañía.
5. Evitas viajar a tus lugares favoritos por miedo.
6. Sientes que estas ahogándote en un vaso de agua.
7. Te quejas por todo e inventas excusas para hacer tus responsabilidades.
8. No te das prioridad, tienes poco amor propio.
9. No inviertes en ti
10. Le das prioridad a lo material antes que lo espiritual.
Estas son algunas características para identificar que te estas fallando, si presentas más de 4, es el momento de que tomes conciencia y busques ayuda profesional, habla con algún amigo o persona que pueda orientarte, con quien te sientas cómodo y asesorado.
Pero no estás solo, puedes mejorar tu vida siempre y cuando decidas. De eso se trata esto, una constante toma de decisiones, no siempre son buenas, no siempre son malas, pero es de decidir, decidir amarte, escucharte, sanar heridas y olvidar el pasado doloroso para escribir una nueva historia, así cuando mires atrás, veras un libro diferente al que en algún momento escribiste.
Yo tomé la decisión de vivir mi vida ayudando a los demás en sus procesos. Los míos no fueron fáciles, sentía que nada me hacía feliz, y pedía a Dios encontrar mi propósito, llegaron muchas personas algunas me orientaban, otras a cubrir mis miedos solo hasta que solté todo lo que tenía, con mucho tiempo encontré que este era mi manera de servir, de aportar. Aunque tu mente suponga ciertas cosas sobre la gente, sobre su éxito, felicidad o paz interior, cada uno lleva dentro un proceso doloroso diferente, a veces parecen fáciles, pero trabajar con tus sombras es complicado, de tiempo y es necesario solo si quieres sentirte pleno contigo.
Mi autor favorito expresaba, “aun en el sufrimiento hay sentido de vida” Victor Frank, un claro ejemplo de un hombre que sufrió en el holocausto de la Alemania Nazi, no creas que tu sufrimiento o tus fallas han sido las mas graves del mundo, evita juzgarte, se compasivo, perdónate y perdona.
La búsqueda del bienestar interior no es como en las películas, con viajes a templos hermosos, halos de luz saliendo del cielo e iluminándote, dándote maestros sabios y amorosos. En realidad, es un camino de dolor intenso, es sacar de ti creencias muy arraigadas, revivir momentos de tristeza para sanarlos de raíz y nadar hacia adentro, muy adentro donde no nos gusta estar, ir más allá del miedo a sacar el polvo que nosotros mismos guardamos debajo de la alfombra, se trata de limpiar hasta la última telaraña.
Sanar esa mirada que una persona que amamos nos hizo una vez y nos lastima, una frase de nuestra madre que nos marcó de por vida, el trabajo que hicimos que nadie vio, entender que los demás también están en sus procesos, dolorosos también, y no tomarte nada personal, saber que los demás hacen cosas desde su propia conciencia y sabiduría, sea poca o mucha, es lo que debes aprender. Todos estamos aquí intentando, algunos intentando hacer dinero, otros intentando encontrar su propia felicidad, algunos lastimando a los demás, pero no es nuestra labor juzgar sino amar, a nosotros mismos y a los demás.
Todo aquel que nos conseguimos en el camino está ahí para enseñarnos algo, como ángeles o maestros, para ser nuestro espejo o hacernos ver nuestras sombras, pero es nuestra decisión entender que ese día el jefe no se despertó con ganas de lastimarte sino, quizás está pasando por una crisis que lo saca de su centro y lastima a los demás sin querer, entender que tu pareja te amaba pero que no sabía lo que sentía cuando dijo eso que te hirió, es ver todo desde otros ojos, los ojos del amor.
No estás solo, llegar a ese momento de entender tu compromiso personal con tu camino y esencia es un camino largo, ¡es importante iniciar! Si así lo deseas puedes empezar a dar tus primeros pasos conmigo, juntos podríamos encontrar ese camino interior que has anhelado.
Te espero, te aprecio y te quiero.
Mariana Rojas.